Con la llegada de la navidad, pensé en posibilidades para generar más ingresos y poder comprar más regalos. Ya trabajo para la universidad, ya hago traducciones para clientes serios a los que conozco desde hace mucho, y ya ahorré lo que tenía que ahorrar. Pero me cegué cuando me llegó una propuesta muy interesante por correo electrónico. Estoy vinculada a muchísimas páginas de internet en las que ofrecen diversas ofertas de trabajo. De vez en cuando aparecen solicitudes para traductores y leo la propuesta y, si va bien conmigo, paso mi oferta. A veces me contratan, a veces no. Bueno, eso es un poco exagerado: he aplicado tres veces, y me han aceptado una. Y resulta que esa una fue un scam. Es un scam. Rayos. Por medio de la página web www.elance.com , página supuestamente seria y tal, me llegó una propuesta para la traducción de un documento sobre discriminación de género en lingüística que debía ser traducido de inglés a español. Vi la propuesta, vi las ofertas de varios cole
a veces, por mucho que intentemos, es imposible sacarnos la realidad de la cabeza...