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La redundancia necesaria de volver a re-aprender a manejar

Y por eso fue que decidimos que ya era hora de sacar mi pase alemán: porque nos dimos cuenta, después de tres años, de que el plan a largo plazo sí era quedarnos en Alemania. Eso lo sabíamos incluso antes de venirnos, pero ese no es el punto. Entonces, como dije, nos llegó el momento de homologar mi pase colombiano y mi pase internacional para poder manejar aquí.

Pero vamos: es Alemania. No hay nada fácil ni rápido. No hay nada que no funcione sin burocracia y procesos y procedimientos.

1. Traducir el pase internacional - que ya viene traducido oficialmente al alemán. Sí. Traducirlo de nuevo al alemán.

2. Traducir mi pase colombiano - que ya está oficializado mediante el pase internacional, que ya viene traducido oficialmente al alemán. Sí. También este hay que traducirlo.

3. Registrarme en una academia de conducción.

4. Registrarme para el examen teórico.

5. Estudiar como loca para pasar ese examen. Pero hay mucho que puede salir mal... y en efecto sale mal. Como por ejemplo, este tipo de preguntas en el examen teórico:

No sólo no tengo ni idea qué es o para qué sirve un catalizador, sino que no me importa. Yo quiero fomentar y generar empleo, por eso dejo que los mecánicos se encarguen de eso...

Parece que la única droga disponible a posibles conductores en Alemania fuera el hachís, porque sólo preguntan por ésta. Entonces aquí no hay coca ni heroína ni burundanga ni xanax ni valium ni ninguna otra droga que atente contra los sentidos - sólo hachis. Solamente. 

Los alemanes como que no creen en esa camaradería que hay entre conductores, en eso de sacar la mano y hacerle ojitos al carro de atrás para que te deje pasar. No. Aquí no hay de eso. Es más, fijo es ilegal.

La razón por la que mi hermana NUNCA va a tener un pase alemán. Nunca nunca nunca.

La segunda razón por la que mi hermana NUNCA va a tener pase alemán. Nunca nunca nunca.

Pero bueno - uno estudia y marca la respuesta correcta. Mi esposo me dijo, "Cuando no sepas qué contestar, piensa como los alemanes: piensa en lo más extremo y lo más exagerado. Eso es lo correcto." Y así se pasa ese examen - pensando como alemanes.


6. Tomar lecciones de manejo con un profesor en el carro de la academia - de esos que también tienen pedales del lado del copiloto. Son mínimo 4 clases: una en autopista, una en carretera, dos en a ciudad - cada una de 90 minutos. Y es chistoso porque llevo manejando la mitad de mi vida - literalmente - y ahora viene un tipo a enseñarme a manejar. No se trata de meter y sacar el clutch, no se trata de saber que la palanca de la izquierda del timón hacia arriba enciende el intermitente hacia la derecha y que la palanca a la derecha del timón activa el limpia-parabrisas. Se trata de saber qué significan estas señales: 


Y no sólo saber qué significan, sino saber cómo reaccionar ante ellas. Por ejemplo, ante el "STOP", aunque no venga nada por ningún lado, se tiene que parar por completo, contar (en voz alta, dice mi profesor) 3 segundos, y luego proceder. Parar 2 segundos es muy poco y 4 segundos es muy largo.

Otra idiosincracia que puede hacer que el conductor en práctica pierda puntos es mirar hacia la izquierda cuando la norma fuera que la derecha tiene la vía. Hay algunas intersecciones que no están señalizadas ni con "STOP" ni con "CEDA EL PASO." En ese caso uno sabe que llega al cruce y el que esté a la derecha tiene la vía. Es sencillo - es de acostumbrarse. Lo que pasa es que la norma indica que, como el que viene a la derecha tiene la vía, uno no tiene necesidad de mirar a la izquierda. Una, colombianita descuidada, mira a la izquierda y el profesor la regaña a una por no seguir la norma...

7. Tomar el examen práctico (manejando ya por fin de verdad) con el profesor y el examinador. 

Y si todo sale bien, sólo si todo sale bien, entonces pasas el examen y te entregan tu pase de una. Sofort. Al menos uno sabe de una vez si el cuento es de echarse a la pena o salir a celebrar - sin hachís. 

Comentarios

  1. Nat... ojalá el Sr. Ruben lea este blog, estoy segura que buscaría la forma de hablar con el señor que te hará el examen y le diría: "Vea llave, usté no tiene mucho que averiguar acá, yo mismo le enseñé a esta pelaíta a manejá, ya ese trabajito está hecho, no pierda el tiempo mi llave y dele el pase a la pelá, total, el mundo tiene mucho mas de qué preocuparse y le doy mi palabra que esa pelá maneja muy bien". Entonces el Alemán, mirará a la derecha (no a la izquierda) y pedirá traducción especialmente del término "mi llave" y definitivamente te daría el pase. Y una vez con el pase... ¿ahora qué hacemos? A celebrar. Con honey, sin hachís y punto.

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    1. Wow! Excelente representación del Sr. Rubén!!

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