El movimiento feminista del siglo XX tuvo claras y grandes líderes - claro, yo digo ahora, varias décadas después, que eran claras... Virginia Woolf invitaba a la androginia para poder ser incluida en el discurso netamente masculino de su época. Simone de Beauvoir criticaba la posición que los hombres establecían y creaban para las mujeres - generando así una desconfianza para con el mal-llamado feminismo. Elaine Showalter demanda la creación y el empleo del ginocriticismo para que las mujeres puedan verdaderamente integrarse al discurso desde siempre controlado por el "falocriticismo" (no estoy segura si me acabo de inventar ese último término o no...). Julia Kristeva, una de mis preferidas, insiste en que esta "ilusión" del feminismo es creada por los hombres y es, por ende, no una verdadera representación de las mujeres. Hélène Cixous invita a la écriture féminine, en la que desde la palabra escrita se reconoce el género del / de la escritor/a (ella es mi menos preferida, porque yo personalmente creo que el masculino es inclusivo, si no históricamente al menos sí en los pasados 100 años; el femenino, por el contrario, es exclusivo, ya que menciona e incluye únicamente a quienes pertenecen a ese género, creado así un sexismo innecesario, que no es del todo la intención del feminismo). Judith Butler informa (sí, informa, porque cuando una cae en la cuenta de lo que ella dice, es tan obvio que casi ofende no haberlo pensado una misma...) sobre el performance, el rol que juega cada género en la sociedad; no necesariamente es un rol que jugamos de manera consciente, ya que desde que los papás deciden pintar el cuarto azul o rosado, o darnos carritos de juguete o muñecas, nos están indicando el rol que debemos llevar a cabo, ya sea en pantalón o falda.
Aunque soy consciente de que mi ultra-simplificado resumen de sus teorías es casi insultante, el punto que quiero hacer es que eran líderes en su época, mujeres brillantes, intelectuales, sin pelos en la lengua y con ideas claras para cambiar el mundo.
Hoy - hoy, ¿quiénes son esas mujeres que están llevando las riendas del feminismo?
Cuando Shakira anunció su embarazo, lo primero que me vino a la mente fue, "Qué terrible, tendrá un hijo sin estar casada. Pobrecita." Y hasta ahí dejé la cosa. Recientemente leí una entrevista que le hicieron a Kate Winslet (en una de esas fuentes ultra-confiables como Cosmo o Vanity Fair), en la que ella anunciaba su tercer embarazo - sería su tercer hijo de su tercer matrimonio. Tres hijos, un papá diferente para cada hijo. Y, de nuevo, lo primero que se me vino a la mente fue, "Pobrecita Rose de Titanic--tendrá otro hijo de otro esposo, nada que logra sentar cabeza, nada que logra mantener marido." Miley Cirus es otro de esos nombres que ronda por ahí cuando se menciona feminismo - pero eso ha de ser fiebre de momento. Mi amiga (le digo amiga porque somos contemporáneas y coterráneas, y ajá, la admiro ful y quiero creer que somos amigas) Catalina Ruiz Navarro escribió un artículo sobre esta última (http://www.pulzo.com/entretenimiento/la-demoledora-columna-de-opinion-de-catalina-ruiz-41941).
El feminismo del siglo XIX consistía en darle voz a quienes no la tenían; el del siglo XX en incluir en el discurso a quienes no cabían; y ¿este siglo? ¿El feminismo de este siglo qué busca? Ya tenemos voz, ya estamos incluidas en el discurso. Ahora, ¿qué queremos demostrar?
Demostrar, como puedo dar fe, que podemos tomar las mismas decisiones que los hombres. Demostrar que tenemos las mismas virtudes, fortalezas y debilidades que los hombres. Que, en efecto, no somos muy diferentes a los hombres. La diferencia es esencial, puramente biológica, y no, no es invisible a los ojos (sorry, de Saint-Exupéry). Mi abuela luchó por el derecho de salir de la casa para poder trabajar, y hoy muchas mujeres conscientemente eligen dejar de trabajar para quedarse en casa. No es un retroceso, es el poder de la voz, el poder del poder elegir. Foucault decía que quien tiene la voz tiene el poder. Ahora que todos, hombres y mujeres, tenemos la voz, todos tenemos el poder.
Quizá el feminismo del siglo XXI lo que intenta decirnos es que no se necesita una mujer Y un hombre para estar completos. Este no es un discurso homosexual, pero hasta es válido en este caso. Quizá lo que Shakira y Kate quieren decirme es que una mujer por sí sola es suficientemente completa para llevar a cabo cualquier tarea - incluyendo formar y criar una familia.
Quizá el feminismo del siglo XXI lo que intenta decirme es que la idea victoriana del angel en la casa es anticuada, y que las mujeres pueden (¿y deben?) explotar su sexualidad al mejor estilo de Madonna y Miley Cirus.
Lo importante del tema es que las feministas conservadoras, o machistas liberales (no estoy segura) como yo entendamos que está bien emplear juicios (bueno, no, no está bien juzgar, ese es uno de los Mandamientos) siempre y cuando no se emplee el tema de género en ese juicio. Si la infidelidad es mala, entonces es igual de malo un hombre a una mujer infiel; si criar a un hijo sin dos padres es malo, entonces la madre soltera es igual de "mala" al padre soltero; si quedarse en casa lavando platos y ropa mientras la pareja trabaja en una oficina es malo, entonces es igual de malo el padre que lava a la madre que lava - por gusto u obligación.
Eso es lo que yo tengo que aprender: juzgar a Shakira (no, Natalya, no, ya dijimos que juzgar es malo) no por no estar casada al momento de quedar embarazada, sino por su último disco o su concierto más reciente. No juzgar a Kate por su tercer hijo, sino por su último rol en una película. Y no juzgar a Miley por su extravagante sexualidad abierta, sino por su corte de pelo o su lengua salida (qué dirán los tailandeses al respecto, tsk tsk tsk).
A mi me gustaría que hubiera un rol claro a quien seguir. Poder decir, mira, yo quiero ser como ella. Las tengo, tengo mis roles ful claros - los míos privados personales (Catalina es una de ellas). Pero quién es aquella que acapara los medios de comunicación y que aparece en todas partes y que llama la atención por sus acciones y sus palabras.
¿Quién?
Dime - quiero saber. Quién es esa mujer que está generando un cambio cultural en nuestro mundo.
¿Quién?
Aunque soy consciente de que mi ultra-simplificado resumen de sus teorías es casi insultante, el punto que quiero hacer es que eran líderes en su época, mujeres brillantes, intelectuales, sin pelos en la lengua y con ideas claras para cambiar el mundo.
Hoy - hoy, ¿quiénes son esas mujeres que están llevando las riendas del feminismo?
Cuando Shakira anunció su embarazo, lo primero que me vino a la mente fue, "Qué terrible, tendrá un hijo sin estar casada. Pobrecita." Y hasta ahí dejé la cosa. Recientemente leí una entrevista que le hicieron a Kate Winslet (en una de esas fuentes ultra-confiables como Cosmo o Vanity Fair), en la que ella anunciaba su tercer embarazo - sería su tercer hijo de su tercer matrimonio. Tres hijos, un papá diferente para cada hijo. Y, de nuevo, lo primero que se me vino a la mente fue, "Pobrecita Rose de Titanic--tendrá otro hijo de otro esposo, nada que logra sentar cabeza, nada que logra mantener marido." Miley Cirus es otro de esos nombres que ronda por ahí cuando se menciona feminismo - pero eso ha de ser fiebre de momento. Mi amiga (le digo amiga porque somos contemporáneas y coterráneas, y ajá, la admiro ful y quiero creer que somos amigas) Catalina Ruiz Navarro escribió un artículo sobre esta última (http://www.pulzo.com/entretenimiento/la-demoledora-columna-de-opinion-de-catalina-ruiz-41941).
El feminismo del siglo XIX consistía en darle voz a quienes no la tenían; el del siglo XX en incluir en el discurso a quienes no cabían; y ¿este siglo? ¿El feminismo de este siglo qué busca? Ya tenemos voz, ya estamos incluidas en el discurso. Ahora, ¿qué queremos demostrar?
Demostrar, como puedo dar fe, que podemos tomar las mismas decisiones que los hombres. Demostrar que tenemos las mismas virtudes, fortalezas y debilidades que los hombres. Que, en efecto, no somos muy diferentes a los hombres. La diferencia es esencial, puramente biológica, y no, no es invisible a los ojos (sorry, de Saint-Exupéry). Mi abuela luchó por el derecho de salir de la casa para poder trabajar, y hoy muchas mujeres conscientemente eligen dejar de trabajar para quedarse en casa. No es un retroceso, es el poder de la voz, el poder del poder elegir. Foucault decía que quien tiene la voz tiene el poder. Ahora que todos, hombres y mujeres, tenemos la voz, todos tenemos el poder.
Quizá el feminismo del siglo XXI lo que intenta decirnos es que no se necesita una mujer Y un hombre para estar completos. Este no es un discurso homosexual, pero hasta es válido en este caso. Quizá lo que Shakira y Kate quieren decirme es que una mujer por sí sola es suficientemente completa para llevar a cabo cualquier tarea - incluyendo formar y criar una familia.
Quizá el feminismo del siglo XXI lo que intenta decirme es que la idea victoriana del angel en la casa es anticuada, y que las mujeres pueden (¿y deben?) explotar su sexualidad al mejor estilo de Madonna y Miley Cirus.
Lo importante del tema es que las feministas conservadoras, o machistas liberales (no estoy segura) como yo entendamos que está bien emplear juicios (bueno, no, no está bien juzgar, ese es uno de los Mandamientos) siempre y cuando no se emplee el tema de género en ese juicio. Si la infidelidad es mala, entonces es igual de malo un hombre a una mujer infiel; si criar a un hijo sin dos padres es malo, entonces la madre soltera es igual de "mala" al padre soltero; si quedarse en casa lavando platos y ropa mientras la pareja trabaja en una oficina es malo, entonces es igual de malo el padre que lava a la madre que lava - por gusto u obligación.
Eso es lo que yo tengo que aprender: juzgar a Shakira (no, Natalya, no, ya dijimos que juzgar es malo) no por no estar casada al momento de quedar embarazada, sino por su último disco o su concierto más reciente. No juzgar a Kate por su tercer hijo, sino por su último rol en una película. Y no juzgar a Miley por su extravagante sexualidad abierta, sino por su corte de pelo o su lengua salida (qué dirán los tailandeses al respecto, tsk tsk tsk).
A mi me gustaría que hubiera un rol claro a quien seguir. Poder decir, mira, yo quiero ser como ella. Las tengo, tengo mis roles ful claros - los míos privados personales (Catalina es una de ellas). Pero quién es aquella que acapara los medios de comunicación y que aparece en todas partes y que llama la atención por sus acciones y sus palabras.
¿Quién?
Dime - quiero saber. Quién es esa mujer que está generando un cambio cultural en nuestro mundo.
¿Quién?
Creo que los medios de comunicación nos permiten hoy tener mucha mas información por eso no considero necesario identificar "una sola quien", estoy segura que hay muchas líderes en el mundo aportando cambios para beneficio de muchos, pero pero pero, tu me conoces y sabes que este tema de feminismo no me convence, creo que mujeres y hombres somos igualmente responsables en desarrollar la habilidad para ser felices y punto.
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